Maresía
El encargo para este espacio expositivo en la sede de L’Antic Colonial, recrea todas las características de una casa típicamente mediterránea, donde la cerámica de la firma es la protagonista absoluta.
También imaginamos a los habitantes de este hogar, porque en nuestros proyectos el cliente es el elemento central, y dimos vida a una pareja de artistas, bohemios, cultos, viajeros y amantes de las islas y del mar.
El proyecto nace con este planteamiento y la casa se define y concreta en un entorno ibicenco, un cálido refugio frente al mar.
Para redondear este mismo espíritu, la casa se bautiza con el nombre de Maresía, que es el olor a mar que se percibe en tierra hasta cierta distancia de la orilla, y se define también con un concepto, el de lo vernáculo en un contexto contemporáneo.
Estudiando algunos tipos de casas tradicionales y analizando la vanguardia de las islas, trasladamos su forma de organización espacial, cerrando la casa sobre sí misma, para protegerla del calor del exterior y dotarla de intimidad.
La fachada principal es maciza, con apenas unas rasgaduras en el muro que permiten adivinar cierta luz interior, y una celosía cerámica, protegida con vegetación, flanquea la puerta de entrada.
En el interior, las estancias se ordenan a los lados de un pequeño patio con un olivo, abriéndose en su fachada interna hacia las vistas del horizonte marítimo recreadas con imágenes retroiluminadas y sonido de oleaje.
Piedras calizas en diversas texturas para revestimientos y pavimentos, madera para el dormitorio y la pérgola del patio, vidrios azules, tejidos naturales y vegetación mediterránea, son algunos de los elementos que nos trasladan a este hogar ideal rodeado naturaleza y de vida social.
